Uno de los hombres más ricos del mundo, Carlos Slim, expresó su descontento con el gobierno liderado por el presidente Andrés Manuel López Obrador y destacó que Telmex ya no es un negocio debido a que ha estado "en números rojos" durante una década.
“Telmex ya no sigue siendo un negocio. (…) Está en números rojos desde hace 10 años”, informó el empresario mexicano desde una conferencia de prensa en grupo Imbursa.
Sin embargo, afirmó que no tenía intención de vender la compañía de telecomunicaciones debido a que es necesario que sea una compañía mexicana.
“Ya les dije a mis hijos que no la pueden vender (Telmex), no es un negocio ya, pero no la vamos a vender”, agregó Slim.
Slim, de 84 años, declaró que había convocado a la rueda de prensa para "aclarar todas las cosas que se dicen" y aprovechó la oportunidad para dar una extensa explicación de su trayectoria empresarial desde 1960 hasta la actualidad.
Durante las consultas, el empresario negó las acusaciones de favorecimiento del gobierno de López Obrador.
A pesar de que reconoció su estrecha relación personal con el líder actual, quien se retirará de la presidencia de México en octubre de este año al finalizar su sexenio.
“Ahora, con el Tren Maya, me reúno más con el presidente. Tres o cuatro horas, (…) pero tenemos nuestras diferencias“, aseguró ante los medios de comunicación.
Slim informó que su compañía de infraestructura solo participa en uno de los siete tramos del Tren Maya, una de las principales iniciativas de López Obrador para impulsar el crecimiento económico en el sureste de México.
Sin embargo, destacó la relevancia del "nearshoring" o relocalización empresarial, un fenómeno que ofrece una oportunidad significativa para México debido a su proximidad al mercado estadounidense, pero que requiere una mayor inversión por parte del sector público y privado en el país.