PLAYA DEL CARMEN

Docente de secundaria responde a señalamientos por asesorías privadas en Playa del Carmen

Explicó que sus asesorías fueron cursos voluntarios de regularización y defendió su trayectoria limpia, aclarando que nunca garantizó aprobar a ningún alumno.

LOCAL

·
Jessica Góngora Guerrero aclaró que sus asesorías fueron voluntarias.Créditos: Eduardo De Luna

La maestra de secundaria Jessica Góngora Guerrero, con más de 20 años de servicio en el nivel básico, fijó postura pública luego de que se difundiera en medios de comunicación que presuntamente condicionaba calificaciones a estudiantes a cambio de pagos por asesorías. En conferencia de prensa, la docente rechazó los señalamientos y explicó que las actividades que realizó durante el receso escolar fueron únicamente cursos de regularización abiertos a quien quisiera inscribirse.

“En estas dos décadas de servicio jamás había dado asesorías, pero por cuestiones personales decidí ofrecerlas en este receso. Lo hice de manera pública, con convocatorias en Facebook, WhatsApp y una plataforma de maestros. En ningún momento pedí la presencia de exalumnos que tuvieran calificaciones pendientes conmigo”, sostuvo.

De acuerdo con la profesora, en total participaron ocho estudiantes cuyos padres solicitaron el curso de forma voluntaria. Incluso una de las tutoras prestó la libreta de su hija para mostrar el método de enseñanza que se utiliza en clase: control de tareas, firma semanal de padres y seguimiento de criterios de evaluación.

“Me caracterizo por ser estricta, sí lo soy, pero siempre dejo en claro desde el inicio del ciclo escolar cuáles son las reglas y los parámetros de calificación”, subrayó.

La polémica surgió luego de que un padre de familia acusara a la maestra de reprobar a su hijo pese a haber pagado mil 200 pesos por las asesorías. Ante ello, Góngora Guerrero aclaró que nunca garantizó aprobar a nadie.

“Yo no repruebo, los estudiantes se reprueban solos cuando no cumplen con lo establecido. Tampoco regalo calificaciones, eso es algo que siempre me ha caracterizado”, señaló.

La docente enfatizó que nunca condicionó calificaciones por pagos.

Según relató, el alumno en cuestión tuvo dos oportunidades de presentar examen extraordinario, con resultados de 17 y 20 aciertos de 50 posibles, sin lograr acreditar la materia. El último examen fue calificado en presencia de la representante de la Secretaría de Educación, Narda, del propio padre y de la directora escolar.

“El joven obtuvo 20.5 aciertos. Fue el mismo tutor quien calificó las respuestas con la hoja en mano. Aun así, me increpó argumentando que había pagado el curso y su hijo no aprobó”, dijo.

La docente puntualizó que las asesorías se impartieron únicamente en un domicilio de la colonia Cristo Rey, donde contó con proyector y material propio, y negó que existieran dos sedes como se difundió.

“Una mamá incluso se quedaba escuchando las sesiones mientras acompañaba a su hijo, todo se hizo de manera transparente”, recalcó.

Al respecto, agregó que la molestia del padre se centró en el costo de las asesorías, por lo que decidió devolver el dinero.

“No necesito esos recursos, lo hice porque sé que casi no hay maestros de ciencias que den este tipo de apoyo. Lamentablemente, se pensó que el pago era garantía de pasar, y nunca fue así”, aclaró.

En su mensaje, Góngora Guerrero lamentó que se responsabilice únicamente al magisterio del bajo rendimiento escolar, cuando también es tarea de los tutores dar seguimiento.

“El problema de la reprobación muchas veces está en la falta de acompañamiento de los padres. Ellos deben revisar las libretas y apoyar a sus hijos. Nosotros ponemos las reglas y la metodología, pero el compromiso debe ser compartido”, afirmó.

La profesora también cuestionó que el caso haya derivado en exposición pública de su vida privada y de su familia, a través de grabaciones y publicaciones en redes sociales.

“Siempre he manejado mi vida de manera privada, pero me vi obligada a aclarar porque se tergiversaron los hechos. No quiero que quede la impresión de que hice algo indebido, mi expediente está limpio”, concluyó.

El alumno tendrá una tercera oportunidad de examen extraordinario, mientras la Secretaría de Educación dará seguimiento al caso para garantizar la legalidad del proceso.