Este domingo al mediodía, personal de la Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat) acudió al club Dick & Willys tras recibir denuncias ciudadanas sobre la colocación de acordonamientos que restringían el acceso a la playa ubicada a un costado del Portal Maya, en la zona turística del centro de la ciudad.
La intervención fue encabezada por el director de Zofemat, Irwin Lili Madrigal, quien explicó que el operativo se llevó a cabo en atención a reportes de habitantes y visitantes que advirtieron la instalación de cintas y estructuras para delimitar un área del arenal frente al establecimiento. De acuerdo con la normatividad federal y municipal, el uso de la Zona Federal Marítimo Terrestre es público y no puede ser privatizado por particulares, por lo que se procedió a la verificación inmediata.
Durante la inspección se constató la presencia de elementos que impedían el libre tránsito por la playa, una práctica considerada irregular al tratarse de un espacio de acceso general. Madrigal informó que se retiraron los objetos y se levantó el acta correspondiente, con el fin de dar seguimiento administrativo y, en su caso, aplicar sanciones conforme a la ley.
Las autoridades municipales recalcaron que ninguna persona o negocio tiene facultad para cerrar o restringir el paso en la zona federal.
“Ningún establecimiento puede apropiarse de un bien público”, subrayó el director de Zofemat al término de la diligencia.
El Portal Maya, donde ocurrió el operativo, es uno de los principales referentes turísticos y culturales de Playa del Carmen. La instalación de cercos en esa área generó inconformidad entre la población local, que de inmediato difundió imágenes y reportes a través de redes sociales, alertando a las autoridades sobre lo que consideraron un intento de apropiación de un espacio público.
Zofemat recordó que existen lineamientos claros para el uso de la franja costera, y que cualquier actividad comercial que se realice en ese espacio requiere permisos específicos que no incluyen el derecho a cerrar accesos. En caso de incumplimiento, los responsables pueden hacerse acreedores a sanciones económicas e incluso a la revocación de autorizaciones.
El organismo hizo un llamado a la ciudadanía para continuar denunciando cualquier acción que limite la libre circulación en playas, y puso a disposición los canales oficiales de reporte para atender de manera inmediata este tipo de situaciones. La dependencia destacó que la colaboración ciudadana resulta fundamental para preservar el carácter público de la franja costera, especialmente en puntos de alta concurrencia como el Portal Maya.
Este hecho se suma a otras intervenciones recientes en diferentes puntos del litoral de Playa del Carmen, donde se han detectado irregularidades relacionadas con la colocación de mobiliario, estructuras fijas y delimitaciones indebidas. Las autoridades municipales señalaron que se mantendrán los operativos de supervisión para prevenir la privatización de playas, un fenómeno que ha generado conflictos en distintos destinos turísticos del país.