A las 9 de la mañana de este lunes, decenas de familias de la colonia Colosio salieron a las calles para exigir la titulación de sus predios, en una marcha pacífica que recorrió desde las oficinas de la extinta Desarrolladora de la Riviera Maya hasta las instalaciones del Instituto Nacional del Suelo Sustentable (INSUS).
Los vecinos, muchos de ellos con más de dos décadas viviendo en la zona, reclamaron el cumplimiento del decreto presidencial emitido el 16 de diciembre de 2021, en el que se establece la regularización de la tenencia de la tierra y la entrega de títulos de propiedad. Sin embargo, aseguran que el proceso se ha enturbiado por la falta de transparencia en los costos y criterios aplicados.
"Estamos exigiendo que se respete el decreto, porque después de más de 28 años de lucha, la mayoría sigue sin título. Más del 80 por ciento de los colonos aún no tiene certeza jurídica", declaró una de las voceras durante la marcha.
Seguir leyendo:
A pesar de anuncio de paro nacional, alumnos de escuelas en Quintana Roo si tienen clases
La molestia crece entre los habitantes al enterarse de que los precios para acceder a un título han aumentado desproporcionadamente.
“De pagar 25 mil pesos, ahora están pidiendo entre 600 mil y 700 mil. Eso no es justicia social, es tratar la tierra como si fuera un desarrollo inmobiliario de lujo”, señalaron.
Durante la manifestación, los colonos avanzaron ocupando un solo carril para respetar la vialidad. Al llegar al INSUS, una comitiva ingresó para entregar un pliego petitorio y exigir explicaciones claras sobre el tabulador de precios aplicado.
“Queremos saber con base en qué están calculando esos montos. Esto no es un desarrollo privado, es una colonia construida con esfuerzo y resistencia popular”, insistió otro de los participantes.
La colonia Colosio, fundada en los años noventa por trabajadores y familias migrantes, se ha convertido en uno de los núcleos urbanos más grandes y emblemáticos de Playa del Carmen. Sin embargo, su historia sigue marcada por la incertidumbre legal sobre la tierra, lo que impide el acceso pleno a créditos, escrituras y servicios públicos formales.
Los vecinos advirtieron que, de no obtener respuesta, continuarán con movilizaciones hasta lograr que se cumpla el decreto y se les reconozca el derecho a la tierra que han habitado y transformado por más de 28 años.