Pese a que no hay una denuncia formal sobre la pesca furtiva en Cozumel, tanto de caracol rosado como de langosta, el representante de la CONAPESCA en el la zona norte de Quintana Roo, Mario Javier Martín Castillo, señaló se trabaja con la Secretaría de Marina para evitar se den estos casos de depredación.
Dijo que es importante se realicen las denuncias formales, esto mediante un escrito dirigido a la CONAPESCA a través de su sitio web, o bien en la Secretaría de Marina, o la representación de la comisión, a fin de tomar medidas específicas, ya que se deben tener los permisos correspondientes para la extracción de la langosta, aun cuando se encuentra activa la temporada.
Y es que uno de los principales problemas que dicen los pescadores de langosta, es el precio en el mercado, a veces menor debido a la presencia de pescadores furtivos que no cumplen con las medidas oficiales de la langosta, es decir, los 13.5 centímetros de largo de cola, como una manera de lograr una pesca sustentable.
El problema, según los pescadores, es que de manera ilegal ingresan a la pesca de langosta, y en menor tamaño la venden a un precio muy bajo, dañando así el mercado y lacerando el desarrollo del crustáceo, interrumpiendo su crecimiento normal y causando un problema a la larga por la baja cantidad de langostas para su reproducción.
Sobre el tema, el funcionario de CONAPESCA aseguró no hay ninguna denuncia, y en no se han detectado caso sobre depredación, incluso del caracol rosado, con una veda permanente y autoveda por parte de la Cooperativa Pesquera Cozumel, quienes aun cuando han tenido la autorización, han preferido la conservación de la especie.
Comentó se han realizado operativos en coordinación con la SEMAR y los inspectores marinos, quienes en los siguientes meses harán algunos de manera terrestre, es decir, visitando sitios donde se expenden productos del mar, especialmente de langosta, cuya veda inicia desde el 1 de marzo hasta el 30 de junio.