La hotelería organizada de la zona sur de Quintana Roo logró sobrellevar las vacaciones de verano de 2024 con una ocupación promedio del 60 por ciento, pese a los desafíos derivados del incremento en sus costos operativos y la baja en tarifas. Así lo informó Raúl Andrade Angulo, presidente de la Asociación de Hoteles del Centro y Sur de Quintana Roo, quien destacó que, aunque se enfrentaron dificultades, algunos destinos lograron cifras aceptables en cuanto a ocupación.
Entre el 17 de julio y el 25 de agosto de 2024, la ocupación hotelera en Chetumal alcanzó un 75 por ciento; en Mahahual, un 71.56 por ciento; en Bacalar, un 77 por ciento; y en Felipe Carrillo Puerto, un 80 por ciento. Estos números reflejan la resiliencia del sector, aunque Andrade Angulo señaló que las cifras pudieron haber sido mejores de no ser por los congestionamientos generados por las obras del Tren Maya y los cortes de electricidad constantes por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
"Las obras del Tren Maya nos afectaron, ya que recibimos muchas cancelaciones debido a la percepción que se generó en redes sociales sobre la dificultad de viajar entre Chetumal y Bacalar", explicó Andrade. Añadió que los cortes de luz también fueron un factor que afectó a los turistas, lo que generó inquietudes entre los huéspedes.
A pesar de estos contratiempos, el dirigente hotelero subrayó que en destinos como Chetumal y Felipe Carrillo Puerto, la ocupación ha sido sostenida en parte gracias a la presencia de trabajadores y ejecutivos relacionados con las obras del Tren Maya.
"Desde que comenzaron los trabajos del Tren, muchos hoteles, tanto de tarifas bajas como medianas, han estado ocupados por este tipo de clientes. No obstante, cuando las obras concluyan, esta ocupación temporal desaparecerá, lo que podría llevar a una baja en los números de ocupación", advirtió.
En Mahahual, uno de los destinos de sol y playa más importantes de la región, la ocupación del 71 por ciento fue similar a la registrada en años anteriores. Andrade destacó que, a pesar de los problemas mencionados, Mahahual podría ver un repunte en los próximos meses gracias a las gestiones de la gobernadora del estado con las navieras, lo que podría atraer a más turistas.
En cuanto a Bacalar, con su 77 por ciento de ocupación, continúa siendo el destino favorito en la zona sur de Quintana Roo. Sin embargo, Andrade mencionó que varios huéspedes han manifestado inquietudes sobre la limitada oferta turística, ya que la mayoría de las actividades se centran en la laguna y sus alrededores. La apertura próxima de la zona arqueológica de Ichkabal podría beneficiar a Bacalar, así como a Chetumal, al ofrecer un nuevo atractivo turístico en la región.
Finalmente, Andrade Angulo señaló que otros destinos como Xul Há y Huay Pix están comenzando a ganar popularidad gracias a la apertura de centros de hospedaje de alto nivel, lo que podría contribuir a su crecimiento turístico en los próximos años.