La XVIII Legislatura de Quintana Roo aprobó una reforma constitucional que transforma a la Guardia Nacional en una fuerza armada adscrita a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). Con 18 votos a favor y 4 en contra, la iniciativa fue aprobada sin pasar por comisiones, argumentando su carácter de “obvia y urgente resolución”, respaldada principalmente por los partidos Morena, PVEM y PT.
Jorge Sanén Cervantes, coordinador de Morena y presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política (Jugocopo), defendió la aprobación de la reforma, criticando las posturas de la oposición y calificando sus objeciones como “berrinches legislativos”.
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Sanén Cervantes destacó que esta modificación constitucional fortalece la estrategia de seguridad pública, al tiempo que recordó las “herencias negativas” dejadas por administraciones anteriores en materia de seguridad. “Los opositores deben estar al tanto de los proyectos del Congreso de la Unión en lugar de quejarse por la llegada tardía de los mismos”, puntualizó el legislador.
Por su parte, Hugo Alday Nieto, del Partido del Trabajo (PT), defendió que la adscripción de la Guardia Nacional a la Sedena mejorará las labores de inteligencia en la lucha contra el crimen. “Las Fuerzas Armadas son el único organismo del Estado que realiza inteligencia de manera efectiva”, sostuvo el legislador. En esta misma línea, Saulo Aguilar Bernés, de Morena, recordó que las represiones del pasado fueron llevadas a cabo bajo gobiernos priistas, y que la actual administración está transformando esa realidad.
Finalmente, Eric Arcila Arjona, también de Morena, subrayó la eficiencia operativa de la Guardia Nacional y la prioridad que representa la seguridad para la ciudadanía. A nivel estatal, destacó que Quintana Roo cuenta con la policía mejor remunerada del país.
La reforma aprobada ha generado controversia entre los legisladores tanto a nivel federal como estatal, pero la mayoría oficialista sostiene que la paz social justifica esta transformación