Decenas de miles de personas reciben el inicio de la primavera en Quintana Roo en alguna de sus 18 zonas arqueológicas. Tulum, Cobá y Muyil son los sitios más importantes para este cambio de estación.
Aunque el equinoccio fue el 19 de marzo, es este 21 de marzo cuando muchos turistas nacionales e internacionales se dan cita en estos espacios. En la zona arqueológica de Chichen Itzá, Yucatán, se calculan 15 mil personas por día en esta temporada. Este lugar es el segundo sitio más visitado en México el 21 de marzo.
Hay extranjeros, principalmente de Estados Unidos y Canadá, quienes dejan entre 100 y 150 dólares por día en la región.
Autoridades de seguridad estatales informaron que se desplegó un operativo especial del 21 al 31 de marzo para cuidar a los turistas que visitan las zonas arqueológicas en Quintana Roo, apoyadas por La Guardia Nacional y Protección Civil.
En la zona maya, la llegada de la primavera es representada por el descenso de Kukulkán en Chichen Itzá, un espectáculo único en el mundo que combina el misticismo y simbología de la cultura ancestral, en el cual se puede observar la imagen de una serpiente alada descendiendo por los escalones de diversas pirámides en la Península de Yucatán.
En Quintana Roo, Tulum es uno de los destinos favoritos para recibir el equinoccio y para presenciar el amanecer del 21 de marzo, ya que de acuerdo con la creencia, la energía de la madre tierra y los primeros rayos de sol de primavera, armoniza el cuerpo y la mente.
Los 18 centros abiertos al público en QR son: Calica, Caracol en Punta Sur, Chacchoben, Chakanbakán, Cobá, Dzibanché, El meco, El Rey, Knichná, Kohunlich, Muyil, Oxtankah, Xaman Ha en Playa del Carmen, San Gervasio, San Miguelito, Tulum, Xcaret y Xelhá. Algunas personas también realizan rituales en esta fecha con el propósito de mejorar su vida, son variados y utilizan semillas en las manos, runas como talismanes, vestidos de ciertos colores durante la fecha, todo como parte del sincretismo cultural que rodea a las civilizaciones modernas, combinando experiencias de diferentes corrientes para asumir como propia alguna celebración.
Un dato a tomar en cuenta es que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (Inah) no permite la realización de ceremonias dentro de las zonas arqueológicas, así como el acceso de equipo fotográfico y de filmación profesional.