Una posible revancha le llegó rápido a Carlos Sansores. Tres años después de ser eliminado en Tokio 2020, el taekwondoín regresa renovado a París 2024, para encontrar el objeto que ocupa sus sueños: la medalla.
El atleta, de 27 años, perdió en su debut contra Ivan Sapina, de Croacia, y quedó sin opciones de repechaje para ir por el bronce; ahora busca meterse de lleno en la pelea por las preseas.
“Muy contento por volver a representar a México en unos Juegos Olímpicos. La vida es de altas y bajas, sólo le agradezco a Dios, porque estoy en un buen momento en mi carrera”, dijo a El Heraldo de México.
La caída en Japón le sacudió los miedos: “Me ayudó, porque me convertí en campeón mundial, panamericano y premio Nacional de Deportes. Son cosas buenas que desencadenó una experiencia no tan buena”.
En 2022, Sansores conquistó el oro en el Mundial de Guadalajara, donde México ganó seis preseas. Ese antecedente pone al taekwondo como un deporte esperanzador en 2024.“La clave es estar motivados, contentos y luchar con la misma pasión, así lo hicimos esa vez”, señaló.
Sansores ha enfocado su preparación en lo mental. “Es importante lo físico, pero creo más en lo psicológico. Mi experiencia en Tokio me hizo entender que debo de llegar fuerte del corazón y de la cabeza”, aseguró.
“Sueño con una medalla olímpica, es la única que me falta. No importa en qué momento de tu vida estés, siempre puedes estar mejor, si te encomiendas a Dios y trabajas mucho por ello”, sentenció el taekwondoín.
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